Reventón de la rueda del coche: una posible precognición en dos sueños
Ayer, día 15 de noviembre de 2024, tras una mañana intensa de videollamadas relacionadas con temas de trabajo, me dispuse a coger el coche para ir a comer con mis padres, tal y como suelo hacer prácticamente todos los días. El relato de lo que pasó es como sigue en tiempo presente, y voy a resaltar en negrita los elementos importantes a tener en cuenta para el relato posterior de los sueños:
Ya cerca de mi destino, estaba en la última recta del trayecto circulando con la tercera marcha a unos 60 km/h, cuando veo que al final de la recta por la que voy aparece un trailer blanco enorme en dirección contraria. El tráiler es bastante ancho y va a bastante velocidad para una carretera secundaria como ésta. La carretera no tiene arcenes, y el asfalto se eleva un palmo sobre la tierra y las piedras que hay a sus dos lados. Calculo que puedo cruzarme con él sin problemas si me mantengo pegado al borde del asfalto, por lo que sigo adelante reduciendo sólo un poquito la velocidad. Pero cuando estoy muy cerca de cruzarme con el camión, me percato de que en ese tramo hay un bache en el lateral del carril por el que circulo (algo que sé muy bien pero que se me ha olvidado por completo). El camión pasa a mi lado en dirección contraria a gran velocidad, con lo que no puedo desplazarme hacia la izquierda para evitar el bache, ni tampoco puedo hacerlo hacia la derecha, porque entonces me sadría de la carretera y chocaría contra un muro de piedras. La rueda del coche atraviesa el bache y siento un golpe tremendo en el coche. A la salida de la rueda del agujero, el coche gira sin más hacia el camión, pero un reflejo mío automático hace que controle la dirección del coche sin llegar a chocar con él. El susto es tremendo, pero no ha pasado nada. Al llegar donde mis padres, bajo para ver si el coche ha sufrido daños y descubro que la rueda está vaciándose de aire con gran celeridad. La rueda está reventada.
Después de comer llamo a la grúa para que venga a recoger el coche y llevarlo al taller. Tengo claro que, aunque no es la decisión más lógica por temas de distancia, tengo claro que quiero llevar el coche al taller del concesionario oficial de Opel en mi pueblo, pues Blai, el propietario del taller, siempre me ha inspirado confianza y fue quien hizo todo el mantenimiento de una forma extraordinaria a mi anterior Opel. Llega la grúa y está llena de fango, pues viene de Algemesí, de regoger coches devastados por la inundación. El conductor me pide disculpas y le digo que no se preocupe lo más mínimo por eso. Ya en el taller, Blai se queja que la grúa ha ensuciado de fango el coche. Observo que la rueda reventada está llena de fango, y le comento que es algo sin importancia. Blai le da un vistazo al coche y me confirma que no tiene ningún daño más allá del reventón de la rueda. Ahora simplemente toca esperar a que llegue el repuesto.
Hacia las 18:00 llego a la merienda/reunión de cada viernes, en el que un grupito de gente compartimos nuestros sueños y tratamos de interpretarlos. Una amiga comparte uno de sus últimos sueños, y me fascina, pues entre los dos encontramos un sentido muy especial de su sueño que indica que ella va por el camino correcto en su vida. Entonces ella me pregunta si tengo algún sueño que compartir. Abro mi diario de sueños y empiezo a buscar en los registros de los últimos días. Y, para mi sorpresa, me encuentro con dos sueños que me ponen los pelos de punta, que paso a relatar a continuación, y voy a subrayar aquello que tiene cierto vínculo con los hechos de vigilia:
12/11/2024 «Se me ha olvidado pagar a Blai los neumáticos nuevos del coche»
«Es de día. Vienen mis padres a visitarme al piso. Me comentan que han venido a Canals para cambiarle el aceite a su coche. Me dicen que Blai les ha comentado que no he pasado a pagar los neumáticos que ha cambiado a mi coche. Me pilla por sorpresa, y ahora recuerdo que fui al taller a cambiar los neumáticos del coche y no lo he pagado todavía. Mis padres hablan entre ellos con un volumen muy alto de voz y yo me uno a ellos también elevando la voz para hablar. Mientras hablo, pienso que tampoco ha pasado tanto tiempo desde que llevé el coche a Blai, y que éste me llamó hace nada para hablar de una cosa sin importancia y podría haber aprovechado para comentarme lo de los neumáticos. Sé que es jueves y puedo pasar por el taller por la tarde. Decido que pasaré por la tarde a pagarle. Visualizo el coche en la calle y que está comenzando a llover sobre él. Veo una nube gris a lo lejos y observo cómo se deshace conforme derrama el agua. Pienso que cuando coja el coche estará un poco sucio porque tendrá algo de agua o fango.»
03/11/2024 «Casi choco contra un coche que va en sentido contrario porque olvido que voy por una calle de doble sentido»
Es de noche. Estoy volviendo en coche por la calle 9 de Octubre, por el segmento que transcurre junto al parque Calixto III y en dirección hacia el colegio Patronato. Voy conduciendo tranquilo y me acompaña una mujer. Tengo la intención de llegar a la intersección inmediata y girar hacia la izquierda para ir a casa de mi abuelo Enrique. Conforme me acerco hacia la intersección, observo que se acerca un coche en sentido contrario, desde la otra parte de la calle y también hacia la intersección. Como sé que el tramo de la calle por el que voy es de sentido único, me voy arrimando hacia la izquierda para girar bien hacia la calle que lleva a casa de mi abuelo. De repente me encuentro con que el coche que viene en dirección contraria ino frena en la intersección y viene directo hacia mí muy veloz. Creo que vamos a chocar. Freno en seco y de milagro no chocamos. El conductor del coche me mira con cara de pocos amigos. En ese instante me doy cuenta de que se me ha olvidado que la calle por la que voy es de dos sentidos y que, por lo tanto, he invadido el carril de sentido contrario. Me sorprende el hecho de haberme olvidado de tal cosa.
Los elementos que destaco son los siguientes:
- Voy en coche
- Olvido algo clave que casi me provoca un choque contra otro vehículo
- Rueda reventada / Cambio de neumático(s)
- Blai
- Barro en el coche
Después de revisar los dos sueños, la sensación que me queda es que ambos están directamente vinculados con el evento y su desarrollo en la realidad de vigilia. Son muchos los símbolos oníricos que se reflejan perfectamente en lo sucedido ayer día 15 de noviembre… ¿Por qué pienso esto? Principalmente porque Blai, como personaje onírico, sólo ha aparecido en otro sueño de hace más de un año y con un papel bastante breve, y no recuerdo ningún otro sueño donde yo estuviera en peligro de tener un accidente serio con coche. Es demasiado poco probable para ser una «mera» coincidencia.
Estas últimas semanas había estado inmerso en pensamientos acerca de mi futuro profesional, en potenciales nuevos proyectos relacionados con ingeniería y en mi experiencia profesional anterior, y al mismo tiempo mi ilusión y ganas de encontrar un nuevo camino personal y/o profesional en el mundo de la investigación y exploración de los sueños.
Siento a nivel interior que la relación entre el evento del reventón de la rueda y los dos sueños que he relatado va mucho más allá de una mera casualidad. Siento que estoy ante una sincronicidad que está queriendo indicarme algo importance acerca de mi camino. Así que me toca seguir indagando…